re-inicio

Luego de fríos meses, de soledad disfrazada de independencia y olvido, aparecieron fuertes sendas. Creyendo que la vida era algo para contemplar y reflexionar, dejé de lado cualquier tipo de oportunidad de sentir. Desde ese día, sabía que iba a predominar la indiferencia y la autonomía. Empezar nuevamente con el mundo fue algo placentero y excitante, hasta que llegó la rutina. Apresada en la apresurada rutina y desinteresada de cualquier relación vivía. Desesperanza. Hasta que la curiosidad llegó, y me encandiló. Atracción. Cuando creía que el pasado predominaba en mi mente apareció o re-apareció lo que una vez quiso ser una posibilidad. Entonces comencé a tomar otro camino, otras palabras. Logré unir aquello que yo pensaba imposible, gracias al azar y a la espontaneidad. Entretenimiento. Fricción. Después, llegó la distancia, una distancia atrevida y desventajosa. Tal vez sea favorable, tal vez no, pero no se por qué, me atrae mucho y me reafirma.